¿De qué material está hecha tu felicidad?

Muchas veces nos preguntamos cuales son las herramientas para nuestra felicidad, radicamos nuestra felicidad a veces en cosas como, esos zapatos de moda que tanto queríamos, en bajar de peso para ser aceptadas por la sociedad o en encontrar al chico perfecto y en el fondo son recetas falsas para conseguir la felicidad. No con esto digo que este mal querer este tipo de cosas para nada puesto que yo también lo he pensado, pero creer que seremos realmente felices cuando alcancemos alguna de estas metas es engañarnos a nosotras mismas.

Y creer que la felicidad nos llegara del cielo me parece un mensaje bastante incorrecto, llenar nuestras vidas de mensajes motivacionales para ser felices también lo es, aparentar ser felices puede engañar a todos menos a ti misma y darte cuenta de eso suele ser un proceso bastante difícil ya que te da cuenta de que lo que estás haciendo en este momento  no te hace feliz o no te llena de manera completa.

¿Entonces?

Para mí el único camino es ser FELIZ, decidir qué vas a despertar de buen humor, decidir que veras cada día como un nuevo reto una nueva oportunidad de hacer y ser quien quieras ser, decidir amar los lunes por ejemplo, de decidir ser optimista ante todo ver los verdaderos colores de todo lo que nos rodea de sonreír a pesar de las derrotas, soñar sin pedir deseos, creer que las cosas van a mejorar pero sobre todo hacer que mejoren, levántate y decide hacer lo que realmente te hace feliz lo que realmente te llena no te quedes allí esperando que la felicidad venga a ti sabemos que eso no va a suceder si tú no te lo propones.

No seamos de esas personas negativas que viven sus días grises seamos positivos y pintemos el mundo se colores lo que hagas hoy será el fruto de mañana y que ganas de levantarte en el futuro y decir hoy soy lo que quiero que feliz me siento, no renuncies nunca a tus sueños despierta y hazlos realidad.

*Llenémonos de momentos, de sueños, de metas, pero sabiendo que nuestra vida no empieza cuando las alcancemos, empieza hoy. A la hora que leas esto. En el momento que decidas que las cosas cambien para ti*